La Gomera es una isla volcánica de una belleza natural incalculable, de la que se destaca su orografía debido a los múltiples valles y barrancos que se han formado por erosión desde que emergió del mar. Una de las maneras de disfrutar de esta belleza es admirando las vistas desde los numerosos miradores que hay distribuidos alrededor de la isla. En este artículo te señalamos 5 de ellos que no te puedes perder.
Mirador de Abrante
El Mirador de Abrante se encuentra sobre Agulo, un pintoresco pueblo situado en el fondo de un valle con el mismo nombre y en la costa noreste de la isla. Este mirador acristalado de siete metros de longitud sobresale de una montaña rojiza, lo que hace que dé la sensación de que estás flotando sobre el valle de Agulo. En días despejados, desde aquí podrás observar una bonita panorámica de la isla vecina, Tenerife, y su emblemático volcán y el pico más alto de España: el Teide.
Mirador de los Roques y Mirador del Morro de Agando
Estos dos miradores se encuentran ubicados dentro del Parque Nacional de Garajonay y desde estos puntos se puede observar el Monumento Natural de Los Roques.
Los Roques son una agrupación de restos magmáticos solidificados que quedaron expuestos después de la erosión del material que los rodeaba. Estas formaciones geológicas reciben los nombres de Agando, Las Lajas, La Zarcita, Carmona y Ojilla. De ellos, el más impactante e imponente es El Roque de Agando ya que es el que alcanza la mayor altitud. Un dato interesante de este roque es que, a pesar de su altura, en la cima se han encontrado restos arqueológicos de aborígenes gomeros.
A pesar de que el Mirador de los Roques y el Mirador del Morro de Agando están separados por apenas un kilómetro de distancia, ambos ofrecen unas vistas especiales, pero muy diferentes de Los Roques.
El Mirador de los Roques está pegado a la carretera y es de fácil acceso, mientras que para llegar al mirador del Morro de Agando hay que recorrer un sendero de 500 metros, adentrándose en la naturaleza y atravesando un puente de madera, hasta llegar a una estructura metálica.
Ambos miradores son ideales para disfrutar de puestas de sol, ver ocasionalmente como rompe el mar de nubes y contemplar la isla de Tenerife en días despejados.
Mirador del Santo
Situado en el barrio de Arure, este mirador recibe su nombre debido a que está junto a la Ermita del Santo. De camino al mirador, desde el pequeño aparcamiento, hay que atravesar una especie de acueducto. Desde este punto se puede observar el valle de Tagaluche y, en días despejados, la isla de La Palma y la isla de El Hierro. Este mirador es especial por lo escarpado que es el monte sobre el que está erigido. También es un lugar ideal para observar diferentes especies de aves rapaces en vuelo.
Mirador de El Palmarejo
El Mirador del Palmarejo está ubicado en la parte superior de Valle Gran Rey, al oeste de la isla. Este mirador destaca por dos motivos: en primer lugar, se trata de una obra del artista canario César Manrique, y segundo es un mirador perfectamente integrado en el paisaje con unas vistas increíbles del valle entero. Ésta fue una de las últimas obras arquitectónicas de César Manrique, el proyecto se inició en el año 1989 y fue finalmente inaugurado en el año 1995.
Estos han sido solo algunos de nuestros miradores favoritos, si quieres conocer más, el Cabildo de La Gomera dispone de una aplicación para móviles (tanto para Android, como para iOS) en la que se muestra la localización y accesibilidad de estos y otros miradores de la isla.
Si estás organizando tu viaje a La Gomera y buscas un alojamiento en el que descansar, nuestros apartamentos son un lugar ideal. Se encuentran a tan sólo 10 kilómetros de dos de estos miradores y a su alrededor encontrarás mar y montañas. ¡Descúbrelos!